Monumento de la Virgen de la Roca en Baiona (Pontevedra)
TIEMPO
Construcción: 1910-1930
LUGAR
Sin duda, una de las obras icónicas de Antonio Palacios en Galicia, la Virgen de la Roca de Baiona condensa de un modo extraordinario muchos de los argumentos simbólicos trazados por Palacios en su arquitectura. En el proyecto original (que surge por iniciativa del empresario Laureano Salgado) la obra funcionaba como faro, pues la Virgen portaba en su mano extendida un farol eléctrico. Su función efectiva, además de la de honrar a la Virgen del Carmen, terminó siendo la de simbolizar la llegada de la electricidad a la Villa de Baiona, así como la particularidad de ser este lugar el primer punto de la península en que se tuvo noticia del descubrimiento de América. En su mano derecha la Virgen soporta, hoy en día, una barca de piedra: “La intención de recordar el acontecimiento histórico se expresaba en la carabela que la virgen sostiene en su mano. Motivo histórico que Palacios vuelve a utilizar en el ábside del templo Votivo del Mar de Panxón.” *
Aunque Palacios ideó la figura de la Virgen con una tonalidad blanca predominante, ésta sólo aflora, en su resolución final, en las manos y el rostro de la Virgen. Estos elementos fiueron labrados en mármol blanco por el escultor madrileño (colaborador de Palacios en otros edificios como el Palacio de Comunicaciones o en la Sede del Instituto Cervantes de Madrid) Ángel García. La figura en su forma final, de marcado carácter modernista, presenta una corona adornada con detalles de cerámica, tal y como es posible apreciar en otras obras del arquitecto (Hospital de Maudes, Círculo de Bellas Artes de Madrid).
*Antonio Palacios. A pedra, o país, a arte, o urbanismo, a renovada tradición: O oficio de arquitecto. Xosé María Ramón Iglesias Veiga, Ir Indo Edicións, Vigo, 1995.